No puedo. Es superior a mis fuerzas. Desde que Andye se fue no he conseguido pegar ojo ni una sola noche. El blog está abandonado. Y mi vida tambien.
Lo único que funciona es mi trabajo. Cada vez gano más casos. Cada vez soy más famosa. Me gusta pensar que Andye leerá los periodicos y me recordará. Por lo demás... He dejado de salir con amigas. He dejado a mi pareja. Lo he dejado todo. Siento que hasta que no la encuentre... No volveré a ser Alison Spencer.
En fin... Espero levantar cabeza algún día. Espero encontrar a Andye algún día. Hasta entonces este blog queda en un letargo. ¿Eterno? Quién sabe. Os espero.
Fdo.:
Alli
lunes, 7 de septiembre de 2009
domingo, 5 de julio de 2009
Me quedo sola...
Bienvenidos de nuevo a este humilde blog, en el que, al final, siempre me quedo sola.
Veamos, por dónde empiezo... Todo comenzó el día de mi boda. Casarme con Will... siempre pensé que el día de mi boda sería inolvidable, pero no en el sentido en el que lo fue. No quiero recordar todo lo que ocurrió, pero lo haré por vosotros. William resultó ser, hablando en plata, un cabronazo. Resultó ser uno de esos maltratadores mezquinos que llevaba yo en mis casos de violencia de género. Me destrozó, física y psicológicamente, nadie sabe lo que es estar en esa situación excepto quien lo ha vivido en sus propias carnes. Andye fue quien me sacó de todo eso. Me ayudo, me prestó su casa, su dinero, todo, me lo dió todo. En aquella época no me resignaba a ser una mujer sumisa, un despojo humano, asi que en contra de mis capacidades, llevé dos o tres juicios, que por supuesto, perdí. Tuve que asistir a sesiones de rehabilitación. Tuve que humillarme. Todo por una historia de amor que jamás creí, acabaría así.
Esto es un pequeño resumen de lo que ocurrió. Ahora estoy bien, y William, gracias a Andye, en la cárcel. Ese fue el último juicio en el que Andye trabajó. Sí, es triste, pero Andye ha dejado el oficio. Me ha dejado el bufete, los registros de todos los casos ganados y perdidos, todas las facilidades, todo, me lo ha dejado todo una vez más. Siento si alguna vez me quejé de su comportamiento. Lo siento de corazón. Espero que algún día, recuerde este blog y entre otra vez, y lea esto, y se acuerde de su vieja amiga Alli. No hubo despedida entre nosotras. Me negué a despedirme de ella. No quise ir al aeropuerto. Cuando quise tomar contacto con ella de nuevo ya era tarde. No le había dicho a nadie dónde iba, ni con quién, ni para qué. Había desaparecido por completo de mi vida. Te recordaré siempre, mi querida Andye.
Y lo más importante. Te encontraré.
Lo importante ahora es que Allison Spencer vuelve a los tribunales, pisando fuerte. Busco socia, por cierto. Cualquier cosa, ya teneis mi número.
Fdo.:
Allison (¡volvemos a la carga!)
Veamos, por dónde empiezo... Todo comenzó el día de mi boda. Casarme con Will... siempre pensé que el día de mi boda sería inolvidable, pero no en el sentido en el que lo fue. No quiero recordar todo lo que ocurrió, pero lo haré por vosotros. William resultó ser, hablando en plata, un cabronazo. Resultó ser uno de esos maltratadores mezquinos que llevaba yo en mis casos de violencia de género. Me destrozó, física y psicológicamente, nadie sabe lo que es estar en esa situación excepto quien lo ha vivido en sus propias carnes. Andye fue quien me sacó de todo eso. Me ayudo, me prestó su casa, su dinero, todo, me lo dió todo. En aquella época no me resignaba a ser una mujer sumisa, un despojo humano, asi que en contra de mis capacidades, llevé dos o tres juicios, que por supuesto, perdí. Tuve que asistir a sesiones de rehabilitación. Tuve que humillarme. Todo por una historia de amor que jamás creí, acabaría así.
Esto es un pequeño resumen de lo que ocurrió. Ahora estoy bien, y William, gracias a Andye, en la cárcel. Ese fue el último juicio en el que Andye trabajó. Sí, es triste, pero Andye ha dejado el oficio. Me ha dejado el bufete, los registros de todos los casos ganados y perdidos, todas las facilidades, todo, me lo ha dejado todo una vez más. Siento si alguna vez me quejé de su comportamiento. Lo siento de corazón. Espero que algún día, recuerde este blog y entre otra vez, y lea esto, y se acuerde de su vieja amiga Alli. No hubo despedida entre nosotras. Me negué a despedirme de ella. No quise ir al aeropuerto. Cuando quise tomar contacto con ella de nuevo ya era tarde. No le había dicho a nadie dónde iba, ni con quién, ni para qué. Había desaparecido por completo de mi vida. Te recordaré siempre, mi querida Andye.
Y lo más importante. Te encontraré.
Lo importante ahora es que Allison Spencer vuelve a los tribunales, pisando fuerte. Busco socia, por cierto. Cualquier cosa, ya teneis mi número.
Fdo.:
Allison (¡volvemos a la carga!)
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