lunes, 4 de febrero de 2008

Trágica noticia...

Siento haber tardado tanto en dar señales de vida, pero todavía no consigo reprimir las lágrimas al recordar...

Era 24 de enero de 2007, quería empezar el año renovándome. No había vuelto a saber nada de Andye, pero sinceramente, no me interesaba.
Nana y yo nos encontrabamos metidas de lleno en la resolución de un caso de asesinato en serie. Mi cliente era inocente, pero sufría un trastorno en el comportamiento, y por ello era que le habían acusado. Había pruebas que le incriminaban, pero no eran suficientes para mí. El día 25 se produciría el juicio definitivo, y se emitiría el veredicto final. Aquella tarde yo me encontraba de comprando los regalos de Navidad para mi familia y amigos cuando de pronto sonó mi móvil, incluso el sonido parecía más apresurado de lo normal. Al otro lado del teléfono oí la voz lejana y nerviosa de Nana.
-Noo... no, yo no te he hecho nada...
Grité su nombre con todas mis fuerzas, ella lloraba, suplicaba, y yo no cesaba de gritar.
-¿Dón... me llev...? ¡...ayu-ud... ocorr...!
No había cobertura. Me dirijí hacia la comisaría, donde averiguaron de donde provenía la llamada a la velocidad del rayo. El polígono industrial al que se referían no estaba lejos, asi que cogí mi coche dejando los regalos y todas mis compras en la comisaría y me fui. Oí una voz masculina.
-¿...este móvil?
La llamada se cortó con un disparo. Mi corazón se aceleró.
Cuando llegué al polígono, encontré a mi cliente con un revólver en la mano. Sólo dijo una última frase.
-Tenía que hacerlo, quería matarme.
Acercó la pistola a su sien y...
Entré en la nave industrial mientras llamaba a una ambulancia. Al fondo, ví el cuerpo inerte de Nana, que yacía sobre el frío suelo rodeado de un charco de sangre. Corrí hacia ella y tapé la herida abierta de su pecho. Yo lloraba y gritaba, y de pronto ella tomó mi mano, temblorosa, y me susurro a duras penas...
-No quiero morir.
Todo quedó en silencio.

El día 31 de diciembre de 2007, Nana murió en el Bellevue Hospital Center, Nueva York.

Creo que eso es todo. Ahora y desde aquí, hago un llamamiento a Andye, por si lee esto... creo que la necesito...